Concentrado Metodológico - 4.09.19 (1)

Mucho más que instruir

   Aspiramos a convertirnos en unos años en una terminal de trasbordo; desde el presente estamos construyendo el futuro. Somos una empresa global, y la calidad del servicio prestado se deriva, en parte, de las acciones que los instructores emprenden con el personal. La cultura de trabajo de una empresa se forma desde la base, aseguró José Leonardo Sosa Barrios, director adjunto de la Terminal de Contenedores de Mariel, durante el Tercer Concentrado Metodológico del Centro de Capacitación, en el que se dieron cita más de una veintena de instructores.

  Tras compartirse ideas esenciales referentes al cumplimiento de las actividades en el Año de Instrucción 2018 – 2019, los principales resultados y deficiencias en el proceso docente educativo, las acciones de mejora y las proyecciones para el presente período, los participantes debatieron en torno a temáticas de interés común.

  Bajo el precepto de que la superación es fundamental, coincidieron en que es preciso que los trabajadores se apropien de las habilidades necesarias, acorde al perfil en formación, y transiten paulatinamente por el plan de carreras, teniéndose en cuenta sus intereses y los de la entidad.  

   Por otra parte, destacaron la trascendencia de potenciar la identificación de personal joven para integrar el claustro del centro, e insistieron en que los candidatos deben ser integrales en el dominio de los equipos, para que, así mismo, la formación lo sea. No obstante, reconocieron que no es una condición fácil de conseguir, y que hay que buscar el espacio para que cada cierto tiempo los trabajadores cambien de posición, proponiéndose el empeño de no perder las habilidades adquiridas.

 En ese sentido, los instructores son los primeros que han de ser ejemplo, como parte del rol determinante jugado. El instructor es un líder y dirige el proceso docente-educativo, sin obviar cuanto proporciona el trabajo en equipo, comentaron.   

 Otras de las reflexiones compartidas fueron la necesidad de desarrollar actualizaciones sobre las modificaciones propuestas en los procesos de mejoras de la terminal, la incorporación del código internacional para la Protección de los Buques y de las Instalaciones Portuarias (PBIP) a las capacitaciones, la constitución de círculos de interés en centros estudiantiles aledaños, y la formación en función de las necesidades y con racionalidad, teniendo en cuenta el tiempo y los recursos a optimizar, entre otras.  

  Durante el intercambio, se reconoció la labor emprendida por Pablo E. Prieto Ordaz, subdirector del Centro de Capacitación.